Pichichi |
En España se llama a un jugador pichichi o zamora de una competición cuando resulta ser el máximo anotador o el portero menos goleado de la misma. Ambas expresiones hacen honor, respectivamente, a Rafael Moreno Aranzadi, alias 'Pichichi', y a Ricardo Zamora Martínez, cuyos nombres sirvieron de inspiración a los diarios Arriba y Marca para crear los galardones que se entregan anualmente tras cada campeonato de liga en España.
Pichichi, deportista entre intelectuales
Rafael Moreno nace en la bilbaina calle de Santa María, hacia 1892, siendo sobrino del escritor Miguel de Unamuno. A pesar nacer en el seno de una familia de intelectuales, destaca pronto en el terreno deportivo, llegando a ser campeón de Vizcaya de lanzamiento de jabalina. Su menuda envergadura es la causa de su apodo, puesto por su hermano Raimundo, cofundador de la sucursal del Athletic Club en Madrid —Club Atlético de Madrid a día de hoy—.
La creciente aceptación del fútbol en Euskadi, verdadera cuna del deporte en el país, lleva al joven Pichichi a probar suerte en las filas del club Bilbao, cuyos colores defendería en la copa de 1911, siendo precisamente eliminado —no sin hacerle antes un gol— al que sería el equipo de su vida: el Athletic Club.
Pichichi y el Athletic Club
El joven delantero, de efigie característica ya que acostumbraba a jugar siempre con un pañuelo anudado en la cabeza, es contratado al término del campeonato por los rojiblancos y pasa al primer equipo, aunque no debutará en partido oficial hasta 1913. Es entonces cuando se convierte en autor del primer gol anotado en el recién inaugurado estadio San Mamés, obra del arquitecto Manuel María Smith.
Los años sucesivos son muy exitosos para la entidad de Lezama, ganando entre 1914 y 1916 tres campeonatos de Vizcaya y tres campeonatos de España —la Copa, en ese momento único trofeo que dirimía cuál era el mejor equipo a nivel nacional—.
Formación del Athletic Club en los años 20 |
Gran generación con Belauste y Pichichi a la cabeza
No deja de ser curioso que nunca se haga referencia a esta formación como una las delanteras históricas del Athletic. La considerada primera —Lafuente, Iraragorri, Bata, Chirri II y Gorostiza— data de los años 30, mientras que la segunda —Iriondo, Venancio, Zarra, Panizo y Gaínza— obtuvo sus éxitos en la década de los 40.
Rápido declive y muerte temprana
Pichichi decide colgar las botas finalizada esa misma temporada, tras los que fueron sus últimos trofeos con el club. No obstante, su idea era seguir vinculado al deporte rey ejerciendo como árbitro, aunque no tuvo tiempo. En Marzo de 1922, habiendo ingerido ostras en mal estado, desarrolla un proceso tifoideo que desencadena su muerte, a la edad de 29 años.
La escultura, que hoy se puede ver a la salida del túnel de vestuarios del moderno San Mamés, es objeto de una ofrenda floral por parte de cada club que pisa el estadio por primera vez.
Ricardo Zamora |
Ricardo Zamora, El Divino
Poco antes de retirarse Pichichi comienza la carrera deportiva de Ricardo Zamora quien, por su parte, nació a comienzos de 1901 en la barcelonesa Ronda de Sant Antoni. Debuta en el Espanyol a la corta edad de 16, y acumula experiencia durante tres campañas hasta que, debido a presiones familiares, abandona la práctica deportiva para centrarse en sus estudios.
El Barcelona, no obstante, logró convencerlo poco tiempo después de que retomase los entrenamientos con su primer equipo, algo que contrarió a la directiva espanyolista, en el que fue uno de los primeros roces entre los dos clubes condales.
Deja el Espanyol y gana dos copas con el Barcelona
La incipiente fama del portero, creador de la famosa parada 'a la zamorana', un despeje de antebrazo, casi con el codo, crecía cada año en Barcelona. En algún momento, Zamora llegó a ganarse el apodo de El Divino, y en las calles de la capital catalana se oía a menudo que "en la vida hay dos porteros: San Pedro en el cielo y Don Ricardo Zamora en la tierra".
Zamora, en plena estirada |
Zamora ficha por el Madrid
Con la llegada de la nueva década, el Madrid Football Club tira de talonario para construir una retaguardia de altos vuelos. Ficha a Ciriaco y Quincoces, reputados defensas del Athletic Club, y a Zamora, por quien pagan a los pericos 100.000 pesetas; una auténtica barbaridad en aquella época.
Con el conjunto merengue llegan nuevos éxitos: dos ligas y dos copas, la última de las cuales ganada en 1936, el que será el último año del guardameta en el fútbol español. La Guerra Civil provoca su exilio en Francia, donde vive sus últimos años como futbolista enrolado en el OGC Nice, donde coincide con Samitier, que había sido compañero en Barcelona y Madrid.
El partido en el que Zamora y Pichichi fueron rivales
Solo existe, a saber, la referencia documentada de un único enfrentamiento entre Pichichi y Zamora. Éste tuvo lugar en la final de copa de 1920, con saldo favorable para el catalán, que consiguió mantener la portería del Barcelona a cero, a pesar de tener enfrente al prolífico —y ya entonces veterano— delantero del Athletic Club.
La primera Selección Española de Fútbol |
Juntos con la selección en Amberes 1920
Lo curioso de la historia de ambos, es que jugaron más partidos juntos que enfrentados. La clave está en los Juegos Olímpicos de Amberes de ese mismo año, 1920, para los cuales se crea la que será la primera Selección Española de Fútbol. En ella coinciden Pichichi y un jovencísimo Zamora, ya titular en el combinado nacional a sus 20 años, con otros grandes de los inicios del fútbol español: Samitier, Artola, Otero, Belauste o Sesúmaga. Consiguen la medalla de plata, obteniendo así el que fue el primer gran éxito del combinado nacional —y el único hasta 1964—.
El torneo daría prestigio internacional a muchos de los jugadores, especialmente a Zamora, reconocido como uno de los grandes guardamentas del fútbol internacional, y siendo el único superviviente de Amberes en la Copa Mundial de Italia '34, donde volvió a brillar, siendo incluido en el equipo ideal del torneo por delante de Planicka, otro grande del momento que fue finalista con Checoslovaquia.